miércoles, 18 de julio de 2007

Harry Potter... quién quiere leer el final?

La distribuidora en Estados Unidos de

la séptima entrega de la saga de Harry Potter ha pedido a varios

sitios de internet que saquen de la web fotografías que parecen ser

del libro, informó hoy el diario "The New York Times" en su página

de internet.

Según el diario, algunas de las páginas son difíciles de leer,

pero el final "fieramente protegido" de la novela es

"definitivamente legible".

La proliferación de las fotografías provocó una gran congestión

en esas páginas, muchas de las cuales dejaron de funcionar, así como

muchos de sus enlaces, dijo el diario.

El libro "Harry Potter and the Deathly Hallows" se pondrá a la

venta en Estados Unidos un minuto después de la medianoche del

viernes próximo (04:01 GMT del sábado).

Hasta entonces, tanto la distribuidora en Estados Unidos como la

editorial en Gran Bretaña se han esforzado por mantener en el mayor

secreto el contenido de la obra de la escritora J.K. Rowling.

Lista Holton, presidente de la empresa "Scholastic", en

declaraciones publicadas por el diario, señaló que para mantener el

espíritu de "la magia de la medianoche" se ha pedido a quienes han

puesto esas página en internet "que por favor las saquen".

The New York Times señaló que los abogados de la empresa están

tratando de determinar la identidad de las personas que colgaron las

páginas en internet.

Por otra parte, la empresa pidió a Gaia Online, un portal de

juegos de azar y contactos sociales, que sacara un enlace que

conduce a fotos con páginas que serían de la novela.

La proliferación de las fotografías en internet ocurrió pese a

que los ejemplares de la novela han sido almacenados en un lugar

secreto del país para evitar filtraciones.

La cadena de librerías Barnes & Noble, que acumula pedidos de 1,2

millones de libros de la última entrega, reconoció el lunes que el

almacén donde están depositados se encuentra en la zona noroeste de

Estados Unidos y está vigilado las 24 horas.

Desde este almacén tendrán que ser repartidos, con grandes

medidas de seguridad, a los más de 700 establecimientos que la

cadena tiene en todo el país.

El contrato que la librería tiene con Scholastic le obliga a

tomar todas las medidas para evitar que se sepa si el mago

adolescente morirá al final de la historia.

Los seguidores de Harry Potter tendrán que estar, por tanto, con

el alma en vilo hasta la medianoche del próximo viernes, cuando

"Harry Potter and the Deathly Hallows" salga finalmente a la venta.